Enfermedad del Parkinson

La vida con Parkinson

Las personas que padecen esta enfermedad necesitan llevar a cabo una serie de cuidados.

Alimentación: La dieta de la persona con párkinson debe ser variada, con un aporte equilibrado de todos los nutrientes, evitando así la pérdida de peso corporal. La actividad física es importante en los pacientes. La dieta de las personas con párkinson debe ser individualizada y adaptada a las características de la persona y al grado de disfunción que provoque la EP.
Ocio y vida social: La vida social cambia en estas personas puesto que la apariencia física genera ciertas inseguridades a la hora de salir a la calle. Debido a las alteraciones en la movilidad, muchas actividades de ocio como quedar con los amigos, practicar algún deporte, viajar, pasear, etc., pueden verse reducidas.
Vida laboral: En algunas ocasiones el impedimento de movilidad hace imposible trabajar como lo haría una persona sin la enfermedad, por lo que hay veces que las personas enfermas se ven obligadas a dejar su puesto de trabajo o llevar acabo una serie de adaptaciones.
Vida sexual: Las personas con párkinson pueden experimentar cambios en su actividad sexual que pueden generar malestar en la vida personal, de pareja o en la vida familiar. Esto es debido a la propia enfermedad o a los trastornos psicológicos que suelen acompañar a la enfermedad.