TEJO.

  El tejo (Taxus baccata)  popularmente conocido como mataburros, sabino, tajo, taxo, tejo común, tejo negro, teijo, teiso, tejo, té hormiguero, entre otros; fue descrito por Carlos Linneo y publicado en Species Plantarum en 1753 (punto de partida de la nomenclatura botánica que se usa hoy en día). Es una conífera gimnosperma de la familia de las taxáceas. Las taxáceas son una familia de coníferas, difundidas desde el Jurásico caracterizadas por sus hojas lineales, aplanadas, enteras, agudas en el ápice, son de óvulos solitarios sin conos, y semillas con una cubierta externa dura asociada a un arilo carnoso colorido. El tejo es actualmente el único representante europeo de este grupo primitivo.


  

Descripción botánica

  Tiene un tronco generalmente corto que puede crecer hasta 10-20 m (ocasionalmente puede llegar a los  28 m) y grueso que puede llegar hasta unos 4m de diametro. Su crecimiento es lento y con una longevidad de hasta 4000 años.Tiene las ramas extendidas, muy abiertas, y ramillas colgantes que, en conjunto, forman una copa densa, ordinariamente muy ancha y muy cónica.  Las hojas son lineales (acículas) y persistentes, de 2 a 4cm. de longitud, dispuestas en dos filas a lo largo de los ramillos; el tono verde oscuro de las hojas confiere al árbol un aspecto sombrío, aunque al verlo de cerca pueda apreciarse el contraste entre ese color oscuro, que es el propio de la parte superior de las hojas (haz), y el verde pálido de la parte inferior (envés). 
  Las flores masculinas están en árboles distintos que las femeninas. Las masculinas aparecen en las axilas de las hojas, en glóbulos amarillos orientados hacia el suelo; las femeninas, solitarias en el extremo de un pequeño eje, se transforman en una semilla ovalada. La floración se produce a finales de invierno o en los comienzos de la primavera.


  Las flores femeninas se rodea de un disco carnoso, primero de color verdoso y luego rojo con un jugo azucarado; el conjunto tiene la apariencia de un fruto semejante a una baya. Toda la planta es venenosa excepto este arillo.


  Es una planta dioica, (es decir, posee individuos machos e individuos hembras ) que puede cambiar de sexo según la estación. Cada piña contiene una única semilla cubierta por una estructura roja que le da forma de baya llamada arillus. 
   La maduración se produce a los 6-9 meses después de la polinización y los pájaros participan en la dispersión de esta al comer las bayas.

Ecología

  Crece en ambientes húmedos y frescos, en zonas montañosas y en las umbrías. Su hábitat son bosques mixtos, barrancos, laderas y escarpes rocosos, indiferentes al sustrato. Crece preferentemente alrededor de montañas donde la densa humedad.  En condiciones naturales, las raíces del tejo europeo pueden estar colonizadas por ciertos hongos microscópicos del suelo, formando una simbiosis que se denomina micorriza arbuscular. Esta simbiosis facilita la nutrición de la planta, especialmente por la captación de fosfato entre otros nutrientes relacionados con la resistencia de la planta con distintos factores bióticos y abióticos. Por lo tanto, la micorriza arbuscular está estrechamente relacionada con la capacidad del tejo para desarrollarse en su medio natural.
  Actualmente en España, el tejo suele encontrarse como árbol aislado, en mezcla con otras especies. El mayor número de ejemplares se halla en el bosque de tejos de la sierra del Sueve en Asturias, la Braña de los Tejos en Liébana (Cantabria) o el Bosque del Tejedelo (Zamora). 

  La lentitud de su desarrollo y germinación lo convierten en una especie poco competitiva que va quedando relegada a enclaves donde la topografía le favorece. Esta escasez ha motivado su catalogación como Especie en Peligro de Extinción, y su consiguiente protección.

  Esta recesión en la especie puede deberse a varios motivos, como el aprovechamiento de su madera; la deforestación, que ha ocasionado cambios ambientales y relegado la especie a aquellas zonas donde el ambiente ha permanecido húmedo y además, el tejo ha sido eliminado por los pastores en numerosas ocasiones por su toxicidad para el ganado.
  En muchas partes de Europa, los tejos antiguos individuales son considerados monumentos de la naturaleza como restos de antiguos bosques y, por lo tanto, protegidos y conservados. En otras, se ha adaptado con dificultad al clima predominantemente (mediterráneo) y sus poblaciones han quedado relegadas a zonas específicas donde la humedad es mayor.

Aplicación medicinal

  Como antes se ha mencionado, todas las partes del tejo (exceptuando la pulpa del fruto) contienen principios tóxicos,  que sólo puede ser empleada en ¡a industria farmacéutica. La toxicidad del tejo se debe a que encontramos toxinas como la taxina o el glucósido taxicantina.
  En la pulpa del fruto (la única parte no tóxica) se ha aislado efedrina, un alcaloide estimulante del aparato respiratorio muy utilizado en la industria farmacéutica para la elaboración de antitusivos (que previene o alivia la tos).
  Más que tóxica, la taxina es venenosa; sin embargo, no lo es con igual grado para todos los animales, pues mientras que para el hombre y el caballo, por ejemplo, resulta muy tóxica, a los rumiantes o a los conejos y
las liebres parece no afectarles en absoluto.
  Es una planta abortiva y estimulante de la menstruación. Actúa sobre el sistema nervioso, llegando a paralizar el músculo cardíaco. La intoxicación se manifiesta por una primera fase de euforia, con aumento de las pulsaciones cardíacas, pasando a una segunda en que las pulsaciones disminuyen hasta que se paraliza el corazón.
  Desde 1971, el Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos ha usado Taxol® (un preparado medicinal que contiene la taxina como principal principio activo) como una droga antitumoral en los ensayos clínicos y ha sido aclamado como uno de los avances más significativos en la quimioterapia del cáncer en la historia reciente. Desde 1990, los ensayos clínicos que usan Taxol® han tenido éxito al tratar el cáncer de ovarios y de mamas en etapa avanzada. Es decir, la toxina del tejo, utilizada en las proporciones adecuadas, es capaz de actuar contra las células tumorales.


   A pesar de esto, se ha demostrado que una simple baya masticada podría ser letal, no se recomienda su uso sin un tratamiento y un estudio previo, por lo tanto se relega su uso para su posible efecto medicinal a laboratorios farmacéuticos que estudien las proporciones aptas para su efectividad.


Historia, mitos y curiosidades

  El Tejo es un árbol dotado de un especial misticismo. En el norte de España, bajo la influencia de la cultura Celta, tiene un marcado carácter sagrado. Los celtas lo veneraban, lo consideraban magico y sagrado pero a la vez lo temian. Bajo el se reunian para celebrar su reuniones y orar a sus dioses.
  Es habitual encontrar tejos cerca de las iglesias ya que la institución ordenó edificar sus edificios cerca de estos árboles para cristianizar a los celtas y hacerles creer que sus ritos eran algo pagano. En la actualidad estos tejos siguen junto a las iglesias. El viejo dicho de tirar los tejos guarda relacion con esto, ya que al salir de la iglesia, las mujeres tiraban semillas o ramillas de este arbol que son muy pegajosas a los hombres a los que querían llamar la atencion.
   Muchos autores clásicos y leyendas hacen referencia al carácter venenoso del tejo. Parece que era muy extendida la práctica, entre las antiguas poblaciones, del suicidio con veneno de tejo cuando perdían a batalla, para evitar la esclavitud y el deshonor, además, con su veneno se emponzoñaban las flechas que se usaban contra las legiones romanas del emperador Augustos.
  La palabra latina Taxus posiblemente deriva de las griegas toxon (arco) o toxicon (veneno). Los griegos y latinos llamaron al tejo árbol de la MUERTE; en muchos países europeos se plantaban en los cementerios (se dice que los tejos de los cementerio que a cada boca de un cadaver llega una raiz de tejo para alimentarse de el), y en la mitología el camino del infierno se representaba bordeado de estos árboles. También existen creencias como las de que talar un tejo trae mala suerte, ya que su corteza rojiza recuerda a la sangre. Los druidas irlandeses también le tenían un gran respeto porque creían que era eficaz contra las hadas y las brujas en ceremonias mágicas.
  La madera del tejo es dura, compacta, inodora, resistente, imputrescible y de muy buena calidad. Al principio de ser cortada presenta un color rojizo, pero con el tiempo se torna de color castaño. Es una madera muy estimada en ebanistería y tornería y con ella se han fabricado puntas de fechas, muebles y quillas de barcos. También, la madera del tejo se ha empleado en la fabricación de arcos y zuecos debido a su gran flexibilidad. Los faraones del antiguo Egipto la utilizaron para la construcción de sus sarcófagos hace ya más de 4000 mil años. Ademas, su facilidad para la poda hace que sea muy facil encotrarlo en jardines formando figuras.

 

 

El tejo en la literatura

Se tiene constancia de que la toxicidad de esta planta era muy conocida desde antiguo, ya que podemos encontrar referencias hacia la planta y sus propiedades en obras literarias como en las dos famosas obras de Shakespeare:
  Hamlet:
SCROOP: “Aún quien reza por vos tensa el arco de tejo, doblemente mortal, contra vuestro Estado”.

  Macbeth (donde podemos encontrar una completa receta culinaria sobre estas pócimas de brujas y hechiceras) también se le menciona:
“Escama de drago, colmillo de lobo y momia de bruja, con panza y mondongo de voraz marrajo de aguas salinas, raíz de cicuta en sombras cogida, hígado que fue de judío blasfemo, con hiel de cabrío y retoños de tejo que en noche de eclipse lunar arrancaron, narices de turco y labios de tártaro, dedo de criatura que fue estrangulada cuando una buscona la parió en la zanja. Haced esta gacha espesa y pegada; con los ingredientes de nuestro potingue, echad al caldero entraña de tigre.”
 

Bibliografía

es.wikipedia.org/wiki/Taxus_baccata‎

www.asturnatura.com

www.taxusmedioambiente.com

fichas.infojardin.com/arboles/taxus-baccata-tejo.htm‎

www.zonaverde.net/taxusbaccata.htm‎

www.planthogar.net

www.orchisgarden.com/CD/tejofinal.htm‎

http://www.medicinasnaturistas.com/

Esther Mínguez Cuevas.